Este miércoles 29 de mayo, Péter Szijjártó, canciller de Hungría, declaró que la Unión Europea (UE) se daña a sí misma con las sanciones antirrusas. Afirma que dichas políticas han fracasado y que si dependiera de Budapest, no existirían más paquetes de sanciones.
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Estas declaraciones se llevaron a cabo durante el encuentro del canciller húngaro y su homólogo bielorruso, Serguéi Aléinik. Allí, Péter Szijjártó, indicó que Hungría no permitirá que el décimo cuarto paquete de sanciones que prepara la UE perjudique la economía de Budapest.
Asimismo, señaló que esta pondría limitaciones en la cooperación del país con Rusia y Bielorrusia. Además, sostuvo que anteriormente, a mediados de febrero la UE adoptó su 13º paquete de sanciones contra Rusia, que incluyó a 27 compañías de la India, Sri Lanka, China, Serbia, Kazajistán, Tailandia y Turquía que, según Bruselas, “han estado implicadas en la elusión de las restricciones comerciales”.
Un mecanismo inutilizable
Días anteriores, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, declaró que las sanciones antirrusas de la UE van “en contra del sentido común” y “simplemente no funcionan”, asegurando que las mismas han fracasado desde su implementación contra Rusia.
“Hungría es un país que cree que si haces algo diez veces, como la imposición de paquetes de sanciones, y eso fracasó, entonces no es razonable hacerlo once veces, hacerlo una vez más, esperando que el resultado sea diferente”, sostuvo Viktor Orbán durante su intervención en el Foro Económico de Catar en Doha.
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