Con la excusa de indemnizar a las víctimas del 11 de septiembre de 2001, Joe Biden ordenó utilizar los fondos afganos congelados.
En consecuencia, el presidente de Estados Unidos firmó este viernes una orden ejecutiva que permite que se distribuyan 7 mil millones de dólares en activos congelados del Banco Central de Afganistán.
De acuerdo a las pretensiones de Washington, el dinero sería empleado en asistencia humanitaria de Afganistán, así como para las víctimas de los ataques terroristas del 11-S.
Las familias de las víctimas del 11-S han estado buscando una compensación financiera de los talibanes durante años y renovaron sus esfuerzos tras la toma del país por parte del grupo el año pasado y la posterior congelación de los activos afganos.
En tanto, los talibanes han reclamado derechos sobre los fondos, que incluyen activos como moneda y oro.
Pero Estados Unidos ha negado el acceso a ellos después de considerar la «caída del gobierno democrático de Afganistán«.
Al tiempo que la asistencia internacional también se ha cerrado en su mayoría a medida que los países sopesaban si enviar ayuda a los talibanes; o seguir plegada a las decisiones de la Casa Blanca.
Biden ha firmado una orden ejecutiva que permite a EE UU disponer de 7.000 millones de dólares del Banco Central de Afganistán depositados en instituciones financieras estadounidenses y que fueron congelados tras el regreso al poder de los talibanes https://t.co/qBcyxmT6S0
— EL PAÍS (@el_pais) February 11, 2022
Secuelas que siguen
La retirada de Afganistán fue un punto bajo para Biden en su primer año en el cargo.
Aún cuando la mayoría de los estadounidenses apoyaban la retirada de las tropas en territorio afgano, la naturaleza caótica de la salida militar generó críticas de republicanos y demócratas sobre el manejo de la administración Biden.
En reiteradas ocasiones, Biden ha defendido firmemente su decisión de retirarse, alegando que permanecer en Afganistán habría costado más vidas estadounidenses.
No obstante, la crisis que vive actualmente Afganistán, no solo es un reflejo del regreso de los talibanes al poder, sino también de la invasión estadounidense en su incursión en Kabul, bajo el argumento de la lucha contra el terrorismo.
This money is neither American nor Biden's. This is the money of the people of Afghanistan and one day they will be forced out.
Biden is a stupid man who always makes stupid decisions. pic.twitter.com/ze5lVbiXLV— Rohullah Khadim (@KhadimRohullah) February 12, 2022