Tribunal Supremo impuso condena de 17 años de cárcel al primer condenado por intento de golpe bolsonarista. La pena se estableció por cinco delitos entre los que destacan la abolición violenta del Estado de derecho y golpe de Estado, así como daños al patrimonio.
La condena fue para el informático y exfuncionario Aécio Lucio Costa Pereira, de 51 años. El condenado entró en enero de este año por la fuerza al Senado de Brasil con una multitud bolsonarista, vestido con una camiseta que decía “intervención militar federal”.
La decisión del Tribunal Supremo se tomó con 9 votos a favor y 2 en contra. Los votos negativos afirmaron que el acusado no cometió un delito de golpe de Estado y solicitaron penas más leves. Pero cabe mencionar que ambos fueron designados por el expresidente Jair Bolsonaro.
Además de Aécio Costa Pereira, existen otras 1.300 personas imputadas en el caso. Cerca de 200 se encuentran detenidas y alrededor de mil están bajo el régimen de libertad condicional.
La fiscalía brasileña cree pertinente y solicita una condena de hasta 30 años de cárcel para los condenados.
Implicación directa de Bolsonaro
El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva, cree que Bolsonaro es responsable de varios temas perjudiciales para el país en los últimos años.
“Creo que está altamente comprometido; cada día van apareciendo cosas, y cada día vamos a tener claro que había una perspectiva de golpe y que el expresidente estaba involucrado en ella hasta los dientes”, subrayó durante una rueda de prensa desde la cumbre del G20.
El 8 de enero, una turba de partidarios del expresidente Jair Bolsonaro invadió el Tribunal Supremo, el Congreso y la presidencia en la capital brasileña. Un ataque considerado por muchos políticos y analistas como el más grave sufrido por la democracia brasileña desde la dictadura.
Jair Bolsonaro es investigado por varios casos. Uno de los más avanzados es el que lo involucra en la venta de joyas y otros regalos de alto valor recibidos por la monarquía saudí. El problema es en que en realidad eran obsequios de Estado y debieron ir a un archivo público.
Además, hace varios meses la justicia electoral brasileña le condenó por haber siniestrado el sistema de voto durante las últimas elecciones. En ese sentido fue inhabilitado políticamente durante ocho años y no podrá presentarse a los comicios presidenciales de 2026.